Nuestros lectores, en ocasiones, nos ponen en la pista de casos muy difíciles de entender. En esta ocasión, alguien ha creído conveniente dejar en medio del campo, encerrados en un saco de pienso de caballos anudado, a dos perritos cachorros de apenas unos días de vida, en un nuevo hecho de flagrante maltrato animal. Afortunadamente, Ángel Flores, que daba un paseo por el lugar, el camino hormigonado que va a la emisora, se ha encontrado a estos cachorros, aún con vida.
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Inmediatamente, tras el estado de conmoción en el que se encontraban muy próximos el uno al otro, los ha bañado, le ha surtido de leche en polvo y ha comprobado que, por suerte, el estado de salud de ambos cachorros es bueno, pese a encontrarse en un saco anudado en el que era materialmente imposible que salieran al exterior (desanudar la atadura no ha sido sencillo para Ángel, que tuvo que cortar para poder desatar el nudo), por lo que han sido abandonados a conciencia. Además, el saco desprendía un olor lamentable, por lo que ha procedido a dicho baño nada más sacarlos.
Los ha encontrado en un lateral de la Hacienda las Niñas, donde el desaprensivo de turno los ha arrojado, tras el montículo donde están los pinos, escondidos entre la maleza. Se les había caído el cordón umbilical ya, pero son de edad tan tierna que aún permanecían con los ojos cerrados.
Se da la circunstancia de que hace seis años y medio, el propio Ángel se encontró con 4 cachorros abandonados en parecidas circunstancias, de los que tres estaban muertos, acogiendo entonces al único superviviente. Ahora, trata de buscar familia de acogida para estos dos cachorros. Los interesados en adoptar pueden contactar con el número de teléfono 670020931.
El abandono de animales, por desgracia, sigue in crescendo por parte de irresponsables que no asumen criar a nuevos cachorros, y los dejan a su suerte como meros objetos, en este caso de tan extraña como cruel forma, pues hubieran estado abocados a morir si no los hubiera encontrado nuestro paisano. Habrían muerto igual por hambre, calor o frío que por cualquier atropello.
Otra de las dificultades que se encuentran quienes son sensibles a estas situaciones de abandono, es el proceso lento e incluso desentendimiento que las administraciones, balones fuera de unas a otras, que dificultan no ya solo denunciar, sino la eficacia de las propias denuncias.
Aprovechamos para destacar la conducta cívica y responsable de nuestro paisano Ángel, y esperemos que no se tengan que dar nunca más situaciones de este tipo.