Las pistas del recinto ferial, próximas al CEIP Nuestro Padre Jesús, acogieron en la tarde el miércoles a una amplia representación de su comunidad educativa. Alumnado, padres y madres y personal docente a título personal unieron sus fuerzas en pro de una enseñanza de calidad que contemple una bajada de ratio que llevaría al mantenimiento de las dos líneas de Infantil con las que históricamente ha contado el Centro.
Al frente de las reivindicaciones se encontraba la presidenta del Ampa El Jardín, Eli Cabezas, junto con una de las vocales, Carmen Rosa Ponce y varias madres afectadas directamente por la situación. Además han contado con el apoyo de representantes de otras AMPAS de la localidad, de la presidenta de FLAMA, Agustina Galán, así como de la alcaldesa de Marchena, acompañada de Zaida Roldán, actual concejal de Educación y de otros miembros de su candidatura, y del candidato de Unidos Por Marchena, Andrés Mateo, quienes declinaron hacer declaraciones "por respeto a la campaña electoral".
Abordamos a una optimista Agustina Galán, con el móvil aún humeante, por la conversación que mantenía con la Consejería de Educación, desde donde le han prometido "que van a estudiar nuestras reivindicaciones, que no son otras que equidad con otros colegios y dotar al Centro de una nueva línea para no masificar las aulas". Muy cerca de ella, al unísono, Eli Cabezas y Mercedes Lebrón incidían en sus justas reivindicaciones, reflejadas en la pancarta que presidía la concentración: el mantenimiento de las dos líneas de infantil, la disminución de la ratio, no al desplazamiento del profesorado definitivo, educación pública de calidad y libre elección de Centro.
En conclusión, "la actual situación es un problema de todo el pueblo, que va en contra de la calidad de la enseñanza y de la conciliación familiar", aseguran.
Según manifestaban, el CEIP Nuestro Padre Jesús "lleva cuatro años padeciendo el recorte de líneas, pero este año al haber más demanda, hay niños que tienen que irse a otro centro".
En este sentido, Lorena Narváez, una de las madres afectadas se quejaba precisamente de tener que "desplazar a mi hijo a otro Centro, lejos de mi trabajo, de mi residencia y de la de mi madre, que es quien le acompaña al trabajo".
Para apoyar las peticiones de la comunidad educativa, también estuvo presente Pilar Durán, representante del ANPE, sindicato que se declara independiente y al servicio de la enseñanza pública, quien manifestó que "desgraciadamente esta situación se viene repitiendo en muchos Centros de la provincia, por lo que seguiremos luchando para conseguir una bajada de ratio, que desgraciadamente no conseguimos, por la oposición de algunos partidos, a pesar de las 50.000 firmas de docentes que se recogieron".