La Hermanad del Dulce Nombre de Jesús anda empeñada en rendir homenaje a las provincias andaluzas. Si ya en 2019, antes de la pandemia le tocó el turno a Málaga, en la noche de ayer viernes la gastronomía y los sones del Carnaval gaditano de apoderaron de la bellísima Plazuela de San Sebastián para disfrute de un público que acudió en masa a la velada.
Pequeños y mayores participaron activamente en todas las actuaciones programas al tiempo que colaboraron para aligerar los gastos de la Hermandad en el mantenimiento, renovación y adquisición de enseres, gracias en gran parte a la Comisión creada a tal efecto.
En una noche plácida y con un magnífico ambiente, abrió la ronda de actuaciones la joven arahalense Margarita Vera, intérprete habitual de canción española, que en esta ocasión, demostrando una voz potente y una extraordinaria conexión con el público, nos trajo antiguos y afamados tanguillos de Cádiz, acompañada a la perfección por la guitarra de Jesús Sánchez, de la chirigota local Los Triana.
La magia, el mentalismo y la hipnosis tuvieron como protagonista al mago sevillano Jossan, que antes de hacer las delicias de pequeño y mayores sobre el escenario, estuvo interactuando con el público, con sus juegos de magia, que dejaban a todos asombrados. Variedad en sus números y participación activa de un público expectante.
El colofón de la noche en cuanto a actuaciones lo puso el minigrupo sevillano Carnavadictos, un guitarra y tres voces que fueron desgranando presentaciones y pasodobles de agrupaciones tan conocidas como los Renacíos, Los principiantes, Los Vikingos o Cumpleaños Infeliz S.A. Magnífica su actuación para poner broche final a una nueva Noche Blanca, una noche de magia, de carnaval y de confraternidad.