El Grupo Popular presentó una moción a Pleno en la que expuso que las mociones de distintos grupos políticos de la oposición aprobadas desde 2015, cuando ganó la Alcaldía María del Mar Romero, no se han llevado a cabo. Después de que la alcaldesa señalara que "no son de obligado cumplimiento", Esther Álvarez, portavoz popular, le expresó que "si tiene más cara, revienta". El portavoz de Marchena Cien por Cien, José López, manifestó que este mandato con mayoría absoluta “va a pasar a la historia porque parece más que una democracia, una autocracia; es decir, una dictadura”, mientras que el portavoz de Ciudadanos, Andrés Mateo, ironizó con que será mejor, tras tres años y medio habiendo comprobado que las mociones de su grupo aprobadas no se lleven a cabo, que "se elimine de los Plenos la parte de la votación". En el transcurso de este punto, la alcaldesa desvió el tema hacia la "no justificación" de los partidos de oposición de las asignaciones a grupos municipales, lo que originó tensos enfrentamientos dialécticos antes y después de la expulsión del portavoz del Grupo Popular, Francisco José Carmona, que se produjo en el desarrollo de esta moción.