Escuela sevillana y sabor a tablao en la primera jornada de la Fiesta de la Guitarra, un espectáculo de calidad con el que vibró el público de la Sala Carrera, llena para la ocasión. Acompañaron al cante David Hornillo (guiño a Pepe Marchena incluido) y la madera de excelente guitarrista por parte de Manuel Vega ‘El Pati’.
El bailaor marchenero Migue Talaverón, ‘El Niño del Roete’, por fin aparecía por méritos propios en la semana de la Fiesta de la Guitarra, por primera vez dividida en cinco sesiones repartidas en dos semanas, y que empieza con ganas de flamenco por parte de un público que la verdad que anoche respondió en cantidad, y muy animoso en todo momento.
Vino Miguel Talaverón, alcanzando notable madurez en su trayectoria, acompañado de un equipo de lujo que nos hicieron recordar el flamenco señero de los tablaos y su génesis en los antiguos cafés cantantes.
Unas sevillanas flamencas bailadas con castañuelas pusieron elegancia desde el inicio, para luego deslumbrar con su excepcional toque por castañuelas Gloria Brenes, acompañando un solo de guitarra del Pati, que estuvo soberbio.
David Hornillo, el alcalareño, a punto de sacar nuevo disco, homenajeó al público marchenero cantando por vidalita como lo hiciera Pepe Marchena de manera excepcional, y también notablemente el cantaor anoche presente en Sala Carrera.
Fue la noche en todo caso de una Gloria Brenes magistral que tomaría el mando bailando tangos de Málaga y que daría paso a las alegrías llevadas al escenario por el marchenero Migue Talaverón.
El cuadro al completo fue in crescendo en el tono jaleoso, en el arte del zapateo y remates finales castizos y concluyentes, en conexión entre sí mismo los artistas y con un público entregado, al que maravilló el espectáculo, premiado con ovaciones cerradas, sobre todo la final.
El fin de fiesta por bulerías fue acrecentando un espectáculo de flamenco puro, de códigos, de miradas, de casta, abierto a la improvisación , de zapateo, palmeo, del embrujo excepcional y plasticidad de la bailaora Gloria Brenes, una de las maestras de Migue Talaverón, y nuestro marchenero, un bailaor constante, creciente, polivalente y cada vez más completo, que anoche bailó pa reventar.