Este viernes por la noche fue descubierto, en la casa hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno, el cartel conmemorativo de las Vísperas de la Inmaculada Concepción, obra del ex Rector del Santísimo Cristo de San Pedro, Miguel Manzanares. La acuarela refleja una preciosa imagen de la Virgen de las Lágrimas con un cúmulo de simbología sobre su faceta protectora, destacando un manto que parece desenvolverse en forma de abrazo y la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno en el pecho de la virgen saliendo por el pórtico de la Iglesia de San Miguel. Dos cintas moradas con los mensajes 'Abrazo de madre que cura las penas' y 'Lágrimas de amor' escoltan la imagen, que consta de dos ángeles en la parte superior que refuerzan el concepto de protección que ya de por sí engloba la Madre y que el autor vinculó a la capacidad de darnos fuerza, tanto en la faceta religiosa como en la humana de las propias madres a las que nos hemos encomendado para sentir alivio y tomar fuerza en los momentos de fragilidad y dificultad vividos años atrás.
La simbología del color morado, relacionada con la Hermandad de Jesús que alumbra la mañana del Viernes Santo en tantos detalles de la procesión (nazarenos principalmente) y que resalta sobre el ocre del cuerpo, los ojos de la Virgen de las Lágrimas un tanto más abierto que de costumbre para reforzar el mensaje de "abrazo y de luz" que el pintor ha transmitido con el cuadro, realizado con técnica mixta (acuarelas, lápices de grafito, lápices de colores y acuarelables), y ese manto de la virgen que nos abraza en los momentos de alegría, tristeza, dolor y plegaria, tal como explicó Manzanares, conforman toda una apología de la Inmaculada Concepción en estrecho vínculo con la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno, resultando el final de la explicación de Manzanares ante los asistentes que llenaron la casa Hermandad, prolongadamente ovacionado.
"Amor de madre y amor de hijo", brazos que abrazan la puerta de San Miguel y que representan el corazón de María, que acoge en su seno a su hijo, Jesús, representado por Nuestro Padre Jesús Nazareno: "Y en él estamos todos", expresaría Miguel Manzanares, a quien José Antonio García, según dijo en esta presentación, mantuvo intrigado con el encargo durante el Pregón de Semana Santa del presente año, tras el cual definitivamente le comunicó una tarea que emprendió con cierta responsabilidad, pues la experiencia en rehabilitación, según afirmó, había sido mayor que en pintura por parte del Licenciado en Bellas Artes.
Juan Vicente Castro, compañero de Junta de Gobierno en la Hermandad del Santísimo Cristo de San Pedro, manifestó haber vivido numerosas "emociones y sentimientos compartidos" como amigo y compañero de Junta, destacando la participación activa de Miguel Manzanares en la vida de Marchena, al punto de considerarlo un marchenero más por su implicación en el mundo cofrade y en la docencia, que imparte en el colegio de Santa Isabel. Su vocación artística desde pequeño se ha cristalizado en el desempeño de su profesión y en la realización de numerosas restauraciones e intervenciones de rehabilitación en Sevilla, Lora del Río, Dos Hermanas, Alcalá, Marchena, Palma del Río, Puebla de Cazalla...así como colecciones particulares, desde imágenes religiosas a azulejos, fachadas y puertas de edificios históricos...