Nuestra Señora de los Remedios, titular de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno, María Santísima de las Lágrimas y San Juan Evangelista, volvió a salir a las calles de Marchena en un domingo marcado por las altas temperaturas.
Los térmometros marcaban 37 grados centígrados a a hora de salida, temperatura demasiado alta ya entrado el mes de septiembre, pero que de vez en cuando acaece por estas fechas, de manera que a las siete de la tarde el cortejo se disponía estrictamente puntual para salir de la Iglesia.
Los monaguillos, representación oficial presidida por el párroco Daniel Mariños, junto al Hermano Mayor de Nuestro Padre Jesús Nazareno, José Antonio García, y personas acompañantes del paso, formaron alrededor de Nuestra Señora de los Remedios, invocada para la cura de males y enfermedades y que procesiona en Marchena desde 1997 por las calles de nuestro pueblo, habitualmente acompañada por la devoción de muchas personas mayores, que una vez más ayer, en las calles y desde sus zaguanes, miraron con fervor a su Virgen.
El paso contó con la dirección de los capataces Pablo Mariscal, Fernando Ruiz, Gonzalo Lora y Jesús Moreno en un recorrido que avanzaría en esta edición de la procesión por las calles Buendía, Espíritu Santo, Viga, Mesones, Plaza Alvarado, San Miguel, San Agustín, Sevilla y entrada al templo, entre los sones de la Banda Villa de Marchena.
Hoy se celebra Función Solemne en Honor de la Virgen de los Remedios, día 12 de septiembre, el de su Festividad.