La calle Obispo Salvador Barrera, para todos conocida como calle Orgaz en nuestro pueblo, es parte emblemática del recorrido de la hermandad del Santísimo Cristo de San Pedro y María Santísima de las Angustias y penúltima revirá antes del regreso a su templo de Santo Domingo.
La cercana parroquia de San Sebastián, con la cual existen muchas vinculaciones a lo largo de la historia, es testigo del imponente paso del Cristo de San Pedro por la coqueta calle Orgaz.
La estrechez y el ambiente de silencio, antaño aún aumentado por apagarse todas las luces, rodea el tránsito de la procesión por el lugar, donde llega tras sobrepasar Cantillos, calle San Pedro y Santa Clara.
A continuación, María Santísima de las Angustias con el referido palio de la patrona de Marchena y San Juan Evangelista, toman la revirá hacia calle San Sebastián con la expectación del público, que ve en el horizonte, como el Viernes Santo se marchita con la Virgen dirigiéndose de regreso hacia su templo, donde en ese mismo momento el Santísimo Cristo de San Pedro debe estar subiendo las penúltimas escalinatas de nuestra Semana Santa, donde varias horas antes, en el interior de Santo Domingo, se congregaban gestos de concentración y anhelo propios de la expectación de la salida.