
"Cuando la tarde languidece renacen las sombras, y en la quietud los cafetales vuelven a sentir, esta triste canción de amor de la vieja molienda en el letargo de la noche parece gemir, una pena de amor, una tristeza..." cantaba Joel el miércoles por la noche de Feria y todavía resuena ese dulce eco de la canción cubana en nuestros oídos, cuando la que ha languidecido es una Feria de Marchena que ha decado un silencio imponente en las calles, casi como el de la pandemia pero por motivos bien diferentes, cada mañana, con el pueblo durmiendo tras apurar momentos, vivencias y conciertos de Feria que quedarán en su recuerdo, como éste, o el de Maleando, grupo sevillano que en San Carmelo actuó tanto en Miércoles como en Sábado de Feria metiéndose al público en el bolsillo versionando los mejores temas del flamenco fusión y otros del mejor pop español de las últimas décadas. Flamenkean2 también dejó grandes momentos de sevillanas con violín en la caseta del Manchón, ya el Sábado de Feria.